Acerca de mí

Mandala de la Tierra y el Cielo

Lo de Silvinananda nació como una especie de broma acerca de mi alter ego esotérico. 

Desde un momento tuve la profunda convicción de que yo era todo lo que experimentaba. Soy Tonal y Nahual, Shakti y Shiva, Yin y Yang, Personalidad y Esencia. Unir ambos lados sería mi sadhana (la práctica, lo que podés hacer).

Entonces Silvina es mi lado terrenal y Ananda mi lado espiritual. Siempre juntos. "Silvina" significa "del bosque", como una druidesa. "Ananda" significa la "dicha espiritual" de nuestro ser original.

En lo terrenal me formé principalmente en disciplinas artísticas: 9 años en danza clásica, 3 en canto y 5 en diseño gráfico. Pero también trabajé como administrativa en Comercio Exterior y como secretaria por más de 14 años, tuve mi etapa emprendedora y de ilustradora de libros infantiles. 

En lo espiritual comencé hace 12 años con práctica de algunas ásanas de Yoga, Chi Kung, Sonidos Curativos y Meditación como mi gran base energética. Luego de un retorno a Gimnasia y un brevísimo paso por Pilates, decidí profundizar en Yoga.

Hace sólo 4 años que practico y debo decir que ¡al fin me siento en casa! Como disciplina física, satisface mi necesidad de estiramiento, fortaleza, equilibrio, acrobacia, belleza y además contribuye a cuidar mi salud. Es todo y más de lo que podría pedir de una disciplina corporal.

Pero no sólo eso -ya parezco una vendedora- además, ayuda al equilibrio emocional a través de la respiración y al equilibrio mental a través del uso de la atención. Nos abre las puertas a una espiritualidad que puede ser equilibradamente terrenal, porque lo hace a través del cuerpo.

El aspecto devocional o Bakhti, surge con el canto de mantras y hacia nuestro gurú interior, Sí Mismo, Yo Superior o Esencia.

Las prácticas del Raja Yoga a través de la meditación sentada y el Yoga Nidra, nos enseñan cómo afinar la concentración de una manera abierta, relajada y más efectiva.

¡Qué decir del Jñana Yoga! resultó complementario a mi extenso y profundo estudio y práctica de los 5 tomos de "Las enseñanzas de Gurdjieff y Ouspensky" por Maurice Nicoll. Una base de 10 años de continua indagación y aplicación de las ideas que allí se exponen, me preparó para enseguida hallar en el aspecto filosófico del Yoga una profunda raíz desde lo intelectual.

Así con una práctica integrada a través del Karma Yoga en el decurso de la vida cotidiana, cada aspecto del Yoga es potenciado. Cada brizna de conciencia en cualquier área, trae una expansión en otra. Es mágico ver en el tiempo cómo es posible, soltando capa tras capa, el proceso de florecimiento de nuestro ser. 

Cada vez siento que me expreso más y más. Me siento más libre y plena aún cuando la vida tenga limitaciones y sinsabores.


Las herramientas que brinda el Yoga me permiten aceptar el momento presente para disfrutarlo o cambiarlo. Al fin y al cabo, el presente es el ineludible punto de referencia y la semilla de nuestro destino.